jueves, 15 de marzo de 2012

Educación en entornos virtuales: liberación o dependencia


Aunque no se trata directamente de cuestiones pedagógicas, el tipo de licencia de la plataforma usada en un proyecto de educación virtual es de fundamental importancia y probablemente impacte en la educación que se imparta a través de ella.
El Software Propietario es aquel en el cual quien lo usa tiene limitaciones para modificarlo, analizarlo en sus componentes internos o distribuirlo, limitándose sólo a poder ejecutarlo. Esto implica una pérdida de libertad en al menos dos planos: por un lado en las posibilidades de uso, porque hay que limitarse al que los dueños de los derechos de autor, un grupo de pocas personas, considera originalmente y que quizás no contempla o excluye intencionadamente el escenario en que está inmerso el usuario, teniendo que invertir este último grandes sumas de dinero para desarrollos ad hoc; por otro, al tratarse de un recurso estratégico, las posibilidades de continuidad de un proyecto -en este caso educativo- que esté basado en software propietario dependen de la capacidad de éxito de la empresa proveedora del software, y se da la paradoja de que, a mayores niveles de éxito de esta empresa o del propio proyecto, son peores las condiciones de negociación para adaptar el software o incorporar mejoras.
El Software Libre, en cambio y teniendo el conocimiento necesario, es posible ejecutarlo cuándo y cómo se requiera, estudiar internamente sus componentes, modificarlos como haga falta y distribuirlo con o sin modificaciones. Además, está asociado por lo general a una comunidad de desarrolladores y expertos de dominio que lo ponen a prueba en una cantidad de escenarios enorme, por lo que probablemente las necesidades específicas de quienes lo usan ya estén cubiertas. De esta forma, la continuidad de un proyecto basado en software libre depende más de sus propias fortalezas y debilidades internas que del desempeño comercial de terceros.